jueves, 10 de abril de 2014

La necesidad de darle una mirada (diferente) al campo de las Dificultades de Aprendizaje - Dra. Lidmi Fuguet



Hoy en día, hablar de las Dificultades de Aprendizaje se ha convertido en un acto conceptual de extrema complejidad debido a las grandes controversias que se han suscitado en atención a la multiplicidad de representaciones sociales construidas alrededor del campo de la Educación Especial.  Entrar en dicho debate implica la necesidad de develar las creencias y valores implícitos en un discurso cargado de  elementos políticamente correctos que en el trasfondo insisten en homogeneizar el producto humano de la escuela, es decir, nuestros alumnos; así como en crear mecanismos inclusivos que se empeñan en la necesidad de excluir al Otro diferente.  Esto nos enfrenta con la incógnita sobre los reales alcances de nuestro sistema educativo y por consiguiente, las constantes propuestas de formación sustitutiva ante la oculta negación del sentimiento de Alteridad.  En tal sentido, se hace pertinente en la actualidad preguntarnos si el campo educativo que históricamente se ha orientado a la atención de aquellos escolares que por diversas razones se han salido  de los rangos normalizadores establecidos por la sociedad, el campo de las Dificultades de Aprendizaje, necesita continuar… cambiar o transformarse, no solo en su discurso, sino también en sus implicaciones pedagógicas y por consiguiente, en la formación del docente.

El planteamiento expuesto nos lleva, a mirar en profundidad qué entendemos (antes y ahora) por Dificultades de Aprendizaje, si esta manifestación nos remite a algo diferente o simplemente a una diferencia manifiesta en los entornos escolares.  Ahora bien, dilucidar esta controversia más que delimitar a un grupo específico de sujetos, abre el abanico de comprensiones y miradas sobre el mismo.  Por consiguiente, el abordaje pedagógico de la población en cuestión podría girar a espacios que buscan respetar la real naturaleza del ser humano y la formación asertiva de una persona crítica y productiva para sí mismo y la sociedad donde se desenvuelve.

Esto conlleva, a su vez, repensar la formación del docente especialista en Dificultades de Aprendizaje, de manera que este profesional sea capaz de entender las múltiples diferencias entre las personas, pero no desde la perspectiva de la mismidad; sino desde la mirada donde la diferencia no está en el Otro, pues ella es evidente en los cotidianos y profundos intercambios entre todos Nosotros.

 Dra. Lidmi Fuguet
Presidenta de CAVIE

3 comentarios:

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  2. Hola Lidmi. Gusto en saludarte de nuevo. Interesante reflexión: la escuela tradicional debe entender que cada alumno tiene su propio ritmo de aprendizaje y también despojarse de paradigmas. ¿Pórque el aprendizaje tiene que ser un proceso estandarizado e inflexible? ¿Si no se aprenden las cosas a la manera en que el docente está acostumbrado a hacerlo, entonces el estudiante se sale de la norma?.

    Ayskel Silva

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  3. Hola Ayskel, saludos de mi parte, ciertamente lso involucrados a los espacios escolares debemos depojarnos de esos parámetros estereotipados y de la cultura homogeneizante escolar para acercarnos a un escuela comprometida con la educación para Todos, una escuela Posible!

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